Elix pretende desauciar 200 inquilinas
Elix Rental Housing, la socimi de la familia de Esperanza Aguirre, pretende desahuciar a 200 inquilinas en Madrid
La socimi, que votó el pasado 15 de enero en su junta de accionistas la compra de otros 4 bloques para ampliar su portfolio en Madrid y Barcelona, es propiedad de la empresa inversora AltamarCAM, dirigida por Claudio Aguirre, primo de la expresidenta autonómica del PP
Redacción/ Sur Media Madrid
Una nueva SOCIMI ha aterrizado en Madrid y ya planea una oleada de desahucios por toda la ciudad. Elix Rental Housing, inversión de AltamarCAM y Claudio Aguirre centrada en la especulación a través de los alquileres, compró hace unos meses su primer bloque en la calle Galileo 22, del cual pretende echar a todas las vecinas para renovar el edificio y subir los alquileres desorbitadamente.
El pasado lunes 15 de enero, los accionistas y directivos de la empresa se reunieron para votar la ampliación de su capital a través de la compra de otros 3 edificios más en la ciudad. El objetivo: seguir la misma estrategia en diferentes puntos de Madrid, propiciando cientos de desahucios de inquilinas a cambio de beneficios millonarios para unos pocos empresarios. Las vecinas de Galileo 22, organizadas en el Sindicato de Inquilinas y apoyadas por activistas de Chamberí, acudieron a la sede de la SOCIMI para señalar a los culpables de estas expulsiones y exigir una negociación colectiva para todas las habitantes de los edificios.
AltamarCAM y su SOCIMI Elix Rental Housing II pretenden replicar el negocio que ya explotaron al máximo con su anterior proyecto Elix Vintage, a través del cual adquirieron 22 bloques en Madrid y Barcelona. Tras desahuciarlos enteros, un total de 421 viviendas, los renovaron y volvieron a vender a un precio mucho más alto en menos de 5 años. Una técnica estrella de la especulación inmobiliaria que busca sacar el máximo beneficio en el menor tiempo posible, sin importar el efecto que tiene en la vida de las vecinas expulsadas ni en los barrios gentrificados. La figura de la SOCIMI resulta clave en todo este proceso, ya que cuenta con unas ventajas fiscales escandalosas que fomentan la especulación sin límites al no tener que pagar impuestos sobre los beneficios adquiridos. Algo por lo que apuestan sin miramientos muchos accionistas sin escrúpulos, como la familia Polanco, que se enriqueció a costa de destrozar la vida de cientos de familias en el anterior ciclo especulativo de la empresa. ELIX acostumbra a obrar con impunidad, incurriendo en prácticas ilegales para expulsar a las vecinas, como ocurrió ayer mismo en Galileo 22, donde intentaron allanar las casas de algunas de ellas. Estos hechos delictivos ya han sido puestos en conocimiento de la justicia.
Sin embargo, la SOCIMI y sus directivos no contaban con la organización inquilina y vecinal que lleva años gestándose en la ciudad contra la impunidad de la especulación inmobiliaria. Desde que recibieron el burofax de no renovación de contrato, las vecinas de Galileo 22 se han organizado a través del Sindicato de Inquilinas de Madrid para dejar claro que no se irán de sus viviendas. Se han sumado a la campaña #NosQuedamos, que consiste en resistir en sus casas y exigir una negociación colectiva, con soluciones dignas para todas.
Ante la falta de respuesta por parte de la SOCIMI, las vecinas pretenden seguir incrementando la presión hasta conseguir una negociación colectiva. Por eso, ayer acudieron a la entrada de la junta de accionistas con el objetivo de señalar a los culpables y responsables de todo esto, a los cuales también se les exige una solución. Actualmente, AltamarCAM está dirigida por Claudio Aguirre, primo de Esperanza, y José Luis Molina, antiguo vicepresidente de Lehman Brothers. Por otro lado, la socimi Elix Rental Housing, responsable de la compra de los inmuebles, está presidida por Fernando Olaso Echevarría. Por último, debemos señalar también a Elix, la gestora que ejecutará esta oleada de desahucios por todo Madrid, y que está dirigida por Teresa Marzo.
A esta lucha se han sumado también activistas de la Casa de la Cultura de Chamberí, hartas de la expulsión de vecinas de toda la vida del barrio a raíz de la gentrificación y la falta de protección para las inquilinas, ante lo cual pretenden activar un observatorio de vivienda en el barrio, junto al Sindicato de Inquilinas de Madrid, dada la situación de crisis habitacional que sufren. Además, el Sindicato de Inquilinas también advierte de que ya ha contactado con varios de los edificios que Elix pretende comprar en Tetuán, Lavapiés, Ciudad Lineal y Canillejas. El plan consiste en organizar a todas las vecinas en un frente común contra la socimi, para pararle los pies antes de que consigan implementar exitosamente su modelo en la ciudad, en línea con el modelo organizativo de base y a largo plazo que promueve el Sindicato.
Las estrategias del Sindicato han tenido efecto en el pasado contra grandes caseros como Néstar, Cerberus, Sareb o Blackstone, por lo que tienen claro que Elix no lo va a tener nada fácil a la hora de hacer negocios con la vida de la gente. La lucha inquilina ha demostrado ser la herramienta más eficaz ante los modelos lucrativos que alimentan proyectos como estos, por lo que las vecinas no van a parar hasta que el derecho a una vivienda digna esté protegido para todas a pesar de los intereses especulativos y rentistas que defienden tanto la patronal inmobiliaria como las instituciones públicas.
Gracias a la acción, la empresa se ha comprometido a crear una figura de mediación en el plazo de una semana para llegar a un acuerdo para todas las vecinas a través del Sindicato de Inquilinas.